El nuevo pacto estatutario se establecerá con el acuerdo de investidura entre PNV y PSOE en el tema del autogobierno.

BILBAO, 10 Jun.

El PNV y el PSE-EE han acordado en su programa preliminar para formar un Gobierno Vasco de coalición la aprobación de un nuevo Estatuto con un amplio consenso en el Parlamento Vasco y en las Cortes Generales, para luego ser ratificado por los vascos, siempre respetando la competencia y la legalidad vigente. Las bases para este pacto estatutario incluirán el acuerdo de investidura alcanzado en noviembre del año pasado entre PNV y PSOE en materia de autogobierno.

Las delegaciones negociadoras del PNV y PSE-EE han llegado a un preacuerdo programático para formar un Gobierno Vasco de coalición basado en los "Principios para el acuerdo para avanzar en bienestar, progreso, autogobierno y la transformación de una Euskadi global".

En el punto 5 del documento, que aborda el tema del 'Crecimiento en autogobierno', el PNV y el PSE-EE coinciden en que "más autogobierno significa más y mejor bienestar para toda la sociedad vasca".

Por lo tanto, durante esta nueva legislatura se comprometen a cumplir totalmente con el Estatuto de Gernika y a establecer las bases para un nuevo pacto estatutario a través de negociaciones, acuerdos y un máximo consenso político tanto en el Parlamento Vasco como en las Cortes Generales, siempre dentro de la competencia y la legalidad vigente.

Ambas formaciones trasladan a estas bases de acuerdo el pacto establecido el 10 de noviembre de 2023 en materia de autogobierno entre PNV y PSOE, firmado por el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, y el presidente del Gobierno del Estado, Pedro Sánchez.

El PNV y el PSE-EE se fijan varios objetivos compartidos en esta materia, como "completar la transferencia a Euskadi del autogobierno reconocido" y negociar y aprobar, "tanto en Euskadi como en el Estado, el futuro autogobierno".

Con el fin de alcanzar estos objetivos, establecen como "prioridades de país" el autogobierno, un nuevo pacto estatutario y la "Euskadi global". La primera prioridad se refiere a la "defensa del autogobierno logrado y la transferencia del autogobierno reconocido pendiente de transferir".

En cuanto al nuevo pacto estatutario, se comprometen a llegar a un acuerdo "lo más amplio posible, tanto en el seno de las instituciones vascas como en las Cortes Generales, para luego ser ratificado por el pueblo vasco".

En referencia a la tercera prioridad, la de la Euskadi global, se plantean "promover e impulsar los intereses vascos en Europa y en el mundo para aprovechar las oportunidades de futuro que ofrece la internacionalización de Euskadi".

Sobre estas bases, el acuerdo refleja su apuesta compartida "por crecer en progreso y bienestar, así como abordar la modernización y el desarrollo integrado" de nuestra sociedad vasca, "en un escenario de transformación y para una Euskadi global".

"Somos conscientes de la importancia crucial de esta legislatura para construir la Euskadi del futuro. Nos proponemos mejorar el nivel de bienestar de toda la ciudadanía, garantizar el progreso y la cohesión social, consolidar y profundizar nuestro sistema singular de autogobierno a través de un nuevo pacto estatutario", aseguran.

Según especifican, estos son los criterios y objetivos sobre los que se basarán los ejes programáticos y que se implementarán en el nuevo Gobierno Vasco, comprometiéndose el PNV y el PSE-EE a ponerlos en marcha y compartirlos.

En el preacuerdo, el PNV y el PSE-EE abogan por deslegitimar la violencia y se comprometen a "seguir impulsando una memoria crítica, inclusiva y ética del pasado", principios que incluyen en el cuarto capítulo del texto, dedicado a la 'Convivencia, memoria y Derechos Humanos'.

En este apartado, se afirma que "la convivencia y el respeto entre todas las personas debe abordarse desde un enfoque transversal y lo más amplio posible".

"Esta es la base de nuestra cultura democrática. La igualdad de mujeres y hombres en Euskadi y la defensa de los Derechos Humanos se han convertido en temas fundamentales para nuestra sociedad. Nunca debemos olvidar de dónde venimos", defiende el documento.

Además, con el objetivo de "fomentar un modelo de convivencia sólido y justo", se propone "impulsar un enfoque basado en cuatro pilares sobre los que construir una sociedad más justa, equitativa y pacífica". En este sentido, se defiende la deslegitimación de la violencia, el reconocimiento integral de todas las víctimas de violaciones de derechos, la construcción de una memoria inclusiva, crítica y ética, y la promoción de los principios y valores éticos y democráticos".

El pacto también hace referencia a "la defensa de la igualdad y de la diversidad LGTBIQ+", otro "pilar fundamental en la construcción de una sociedad más justa". Asimismo, se compromete a "combatir la violencia machista", que se considera un "deber compartido por toda la sociedad" y que "debe ser abordada por todos los poderes públicos en Euskadi como una violación de los derechos humanos y un problema social de primer orden".

El PNV y el PSE-EE especifican que, en este asunto, los "objetivos compartidos" son "promover la paz, la justicia y el bienestar para todas las personas" y "erradicar la aceptación social de la violencia como medio para resolver conflictos o imponer ideas".

También buscan "fomentar el respeto a la dignidad humana, la igualdad de derechos y oportunidades, la justicia y la solidaridad, combatir la violencia machista" y "defender, a través del diálogo y el acuerdo con los agentes sociales y los representantes políticos, la igualdad y la diversidad LGTBIQ+ para construir una sociedad más justa".

Para lograr este objetivo, establecen como prioridades la igualdad de mujeres y hombres en Euskadi, "como un objetivo prioritario e incuestionable de la sociedad vasca", la defensa de los derechos LGTBIQ+, así como su igualdad y diversidad.

En cuestiones de convivencia y derechos humanos, acuerdan "seguir impulsando una memoria crítica del pasado, tanto histórica como reciente", y promover "una cultura social y política de respeto a los Derechos Humanos". Por último, mencionan la cooperación para el desarrollo, en la que destacan un "compromiso con la solidaridad internacional".