BILBAO, 6 Oct.
El termómetro de la economía vasca se situó en el mes de septiembre en el valor 119,6, todavía en la región de desarrollo sólido, si bien sigue el desarrollo de despacio desaceleración, según informó el Departamento de Economía y Hacienda del Gobierno vasco.
Esa desaceleración es resultado de un "enfriamiento del consumo privado", que se ve perjudicado por la pérdida de poder de compra socia a la alta inflación, "pese a la importante creación de empleo".
En sentido opuesto, según ha señalado el Gobierno vasco, la inversión exhibe "un destacable dinamismo", si bien "se modera tenuemente" por el incremento de la indecisión. Por último, ha subrayado que las exportaciones se sostienen fuertes, pero "algo menos que el mes previo".