BILBAO, 19 Dic.

El acceso al hospital de Cruces desde la recta de Max Center, ubicado en Barakaldo, estará operativo a partir del jueves, 21 de diciembre. Este proyecto, que ha contado con una inversión de 3,9 millones de euros y un año de trabajos, ha sido anunciado por el diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial de Bizkaia, Imanol Pradales, como una gran noticia para las más de 175.000 personas que viven o trabajan en la Zona Minera y la Margen Izquierda. Este acceso más rápido, cómodo y seguro beneficiará tanto a los pacientes como a las ambulancias y profesionales de la salud que se desplacen hacia el hospital.

La Diputación ha destacado que este nuevo acceso directo mejorará los tiempos de recorrido y la seguridad tanto para los usuarios del hospital como para los profesionales de la salud y las ambulancias. Anteriormente, la falta de una conexión directa implicaba rutas más largas y congestionadas, aumentando el tiempo de viaje y el riesgo de accidentes. En situaciones de emergencia, este nuevo acceso permitirá una respuesta más rápida y eficiente.

La nueva infraestructura conecta la carretera BI-10 con la N-634, incorporando un nuevo ramal de salida desde la BI-10 hacia la N-634 y una glorieta que conecta el ramal con la N-634 y con el ramal de acceso existente a la BI-10 desde la N-634.

A partir del miércoles 20, también estará en funcionamiento una nueva pasarela peatonal que permitirá cruzar sobre el nuevo vial sin tener que utilizar un paso de peatones a nivel, minimizando así el peligro. Además, se ha instalado una barrera acústica vegetal para reducir el impacto acústico que la carretera actual provocaba en las viviendas cercanas.

Se han llevado a cabo mejoras en el firme de toda la zona afectada por las obras en la BI-10, se han repuesto las defensas, la señalización y la cartelería, se ha renovado el alumbrado con luminarias LED, se ha restituido la telemática y el drenaje en la zona afectada y se han restablecido los servicios afectados.

Como medida complementaria, se ha diseñado un entrelazado en la BI-30 en dirección a Bilbao, en el barrio de Cruces, que permitirá realizar el movimiento hacia la N-634 sin necesidad de pasar por el núcleo de Cruces, evitando así recorridos adicionales para miles de vehículos.

Pradales ha concluido que esta nueva vía no solo reducirá considerablemente los tiempos de recorrido, sino que también mejorará la seguridad, especialmente para los vehículos de emergencia. Además, las mejoras implementadas, como el entrelazado en la BI-30, aliviarán notablemente el tráfico en el centro de Cruces.