La Guardia municipal de San Sebastián advierte sobre la necesidad de autorización para volar drones en la ciudad

En el año 2023, se han interceptado un total de diez actividades no comunicadas que estaban propuestas para sanción en San Sebastián.

SAN SEBASTIÁN, 2 May.

La Guardia Municipal de San Sebastián ha recordado la importancia de obtener autorización para volar drones en la ciudad. Durante el año anterior, el Consistorio gestionó 46 solicitudes de permisos de vuelo y la Guardia Municipal descubrió y propuso sancionar diez actividades no comunicadas.

Durante una conferencia de prensa en la capital guipuzcoana, Martín Ibabe, concejal de Seguridad, Bomberos y Protección Civil de San Sebastián, señaló que el avistamiento de drones en la ciudad ha aumentado considerablemente. Este fenómeno se intensifica con la llegada del buen tiempo y permite obtener imágenes virales en las redes sociales.

Ibabe enfatizó la necesidad de obtener una autorización para volar drones en Donostia, ya sea con fines comerciales o recreativos. Desde el 31 de diciembre de 2020, existen requisitos mínimos regulados por normativa europea que se aplican a drones de uso recreativo y profesional, sin importar su tamaño o peso.

Para volar un dron, es imprescindible registrarse como operador en la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), obtener una formación mínima como piloto de drones, contar con un seguro de responsabilidad civil, seguir las reglas de operación establecidas y respetar las limitaciones de vuelo en ciertas zonas.

Ibabe explicó que, dada la ubicación de San Sebastián en una zona de influencia aeroportuaria, todos los vuelos de drones deben ser controlados y registrados por Enaire. Además, está estrictamente prohibido sobrevolar aglomeraciones de personas y se aplican las mismas normativas a drones de menos de 250 gramos.

Los pilotos de drones deben aprobar el examen de AESA de Nivel 1 para obtener un certificado que les permita volar estos aparatos. Además, existen restricciones en altura y distancia, así como prohibiciones de vuelo en ciertas áreas protegidas.

Ibabe informó que la Guardia Municipal ha recibido numerosas denuncias de vuelos no autorizados de drones en la ciudad en los últimos meses. Se han detectado hasta 20 casos al mes en lugares como Urgull, Ulia y las playas de la ciudad, los cuales están siendo monitoreados por las autoridades.

A pesar de la dificultad para identificar a los responsables, la Guardia Municipal ha logrado encontrar a personas detrás de actividades ilegales basándose en investigaciones y seguimiento de vuelos no comunicados.

Durante el año pasado, se enviaron actas a la Agencia Estatal de Seguridad Aérea por diez vuelos no comunicados interceptados, con posibles sanciones que van desde los 60 hasta los 225.000 euros, dependiendo del uso recreativo o profesional de las imágenes obtenidas con los drones.