BILBAO, 8 Feb.
La mayoría de los vascos viajan ahora este miércoles sin mascarilla en el transporte público, si bien todavía muchas personas sostiene la precaución y prosigue portándola a primeras horas de este primer día de vigencia del alzamiento de la obligatoriedad de su empleo.
Esta día llegó a Euskadi en el momento en que la pandemia de la Covid-19 prosigue en números bajos. Osakidetza contabilizó la última semana 274 casos de coronavirus, 72 pacientes en planta y 8 en las Unidades de Cuidados Intensivos de los centros de salud.
Este pasado martes el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó el objetivo del empleo obligación de las máscaras en el transporte público, si bien su utilización en él se prosigue sugiriendo a personas atacables y a los que muestren síntomas de infección respiratoria.
En todo caso, el tapabocas todavía es obligación en centros de salud, farmacias o centros de salud, tal como en clínicas bucales, de estética o fisioterapeutas.
La situación epidemiológica de hoy, con la amplia y extensa vacunación de la población, llevó a la pandemia a la baja y a que haya unos cuadros de infección mucho más leves, lo que llevó a Sanidad a tomar la resolución de sacar la mascarilla en trenes, buses o metros, donde eran obligatorias desde el 4 de mayo de 2020.
Este miércoles por la mañana la mayor parte de vascos decidieron dejar la mascarilla en el hogar en el momento de coger el metro, el autobus o los trenes, si bien todavía un óptimo número de personas eligieron continuar con ellas de momento, por precaución. No solo fueron personas mayores las que la mantuvieron, sino más bien asimismo jóvenes.
