En Bilbao, el 10 de diciembre, se ha conocido la triste noticia del fallecimiento de Mario Fernández, quien fue vicelehendakari y presidente de Kutxabank, a la edad de 81 años. Su muerte se produjo tras una larga batalla contra una enfermedad que lo aquejaba.
La delegada del Gobierno en el País Vasco, Marisol Garmendi, expresó su pesar a través de las redes sociales, destacando la importancia de Fernández en la historia política vasca. Afirmó que fue una de las figuras más significativas para la consolidación del Gobierno Vasco, reconociendo su inteligencia y capacidad de gestión en el desarrollo del Estatuto de Gernika y el autogobierno en la región.
Fernández ocupó el cargo de vicelehendakari durante el mandato de Carlos Garaikoetxea entre 1982 y 1985. En abril de 1984, fue elegido como parlamentario por el Partido Nacionalista Vasco (PNV), continuando así su labor en el Gobierno vasco hasta que dejó su puesto en enero de 1985.
En el año 2009, asumió la presidencia de BBK, tomando el relevo de Xabier de Irala. Posteriormente, tras la fusión de las tres cajas de ahorro vascas y la creación de Kutxabank en 2012, fue nombrado presidente ejecutivo de esta entidad, una posición que ocupó hasta su dimisión en 2014.
No obstante, su carrera no estuvo exenta de controversias. Después de su salida de Kutxabank, fue objeto de una investigación por parte de la Fiscalía Anticorrupción, que lo acusó de apropiación indebida relacionada con ciertas irregularidades durante su gestión, las cuales beneficiaron económicamente al exdelegado del Gobierno Mikel Cabieces. En 2017, ambos fueron condenados a medio año de prisión, lo que marcó un capítulo polémico en su legado.
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