VITORIA, 23 de diciembre. Recientemente, el Lehendakari Imanol Pradales ha hecho una declaración contundente acerca del estado del Gobierno vasco tras seis meses de mandato. Durante una rueda de prensa celebrada en el Palacio de Ajuria Enea, Pradales destacó que el Ejecutivo ha alcanzado una fase de consolidación, describiendo que ahora es el momento de “acelerar el paso” y “meter una nueva marcha” para enfrentar los desafíos que se avecinan, apelando a la colaboración de todos los sectores de la sociedad.

En el contexto de su comparecencia, Pradales subrayó que los tiempos actuales no son sencillos, señalando el cambio del orden mundial, la fragmentación de los bloques políticos, la erosión del multilateralismo y la reubicación de los centros de poder y comerciales, así como las diversas guerras y luchas por los recursos. Esta realidad, según sus palabras, exige una respuesta ajustada y decidida por parte de Europa, que se encuentra “en una encrucijada” que requiere de “decisiones vitales” para abordar los retos con éxito y garantías.

El Lehendakari advirtió sobre el incremento del individualismo y el populismo, fenómenos que, a su juicio, contribuyen a una creciente “inestabilidad”. En su análisis, puso de relieve que muchas naciones, que alguna vez fueron consideradas potencias mundiales, ahora enfrentan importantes desafíos que dificultan su funcionamiento político. “Estamos viendo ministros que no logran mantenerse en el cargo más de tres meses, cambios de gobierno constantes, y el incumplimiento de compromisos adquiridos. En resumen: incertidumbre”, sostuvo Pradales, advirtiendo que la sociedad vasca podría verse atrapada en una situación similar de un día para otro.

En respuesta a esta incertidumbre, el Lehendakari abogó por anticiparse con “palabras y hechos”. Resaltó que la política contemporánea necesita abrirse a la diversidad de opiniones, fomentando la empatía, el diálogo y la búsqueda de consensos desde una postura de humildad. Esta actitud, opinó, no solo es necesaria, sino que también es lo que la ciudadanía vasca espera del Gobierno ante los grandes desafíos que se presentan.

Durante su análisis de estos primeros seis meses al frente del Ejecutivo, Pradales afirmó que se ha establecido un nuevo Gobierno y que han comenzado a operar a un ritmo acelerado, aunque manifestó que eso no es suficiente. “Es fundamental incrementar el ritmo”, enfatizó, sosteniendo que la “ambición y autoexigencia demandan velocidad” y un esfuerzo adicional ante los retos que se vislumbran en el horizonte.

“Los desafíos que debemos enfrentar exigen que aceleremos el paso y cambiemos de marcha”, añadió. Además, Pradales reconoció las dificultades que enfrenta la población, lo cual puede observarse “día tras día”. Subrayó que la solución a estos problemas no puede ser una cuestión aislada, sino que debe contar con “la aportación de todos”. Recordó, en este sentido, que en su primer mes de mandato llevó a cabo una serie de contactos con todas las fuerzas políticas, así como con diferentes agentes económicos y sociales, buscando un enfoque colaborativo para los temas que atañen a la sociedad vasca.