Crónica País Vasco.

Crónica País Vasco.

Eibar, la pequeña ciudad con un equipo de fútbol en lo más alto

Eibar, la pequeña ciudad con un equipo de fútbol en lo más alto

Eibar es una pequeña ciudad situada en la comarca del Bajo Deba, en la provincia de Gipuzkoa. Con una población de poco más de 27.000 habitantes, es una de las ciudades más pequeñas que cuenta con un equipo de fútbol profesional en La Liga española.

El Eibar, fundado en 1940, ha experimentado una trayectoria impresionante en los últimos años, pasando de la Tercera División española a la Primera División en tan sólo ocho temporadas. Pero, ¿cómo lo ha conseguido?

La historia del Eibar en la segunda división B

A principios de los años 90, el Eibar se encontraba jugando en la Tercera División española, luchando contra otros equipos de la comarca del Bajo Deba y del Goierri. En 1994, el equipo fue adquirido por el empresario gallego Antonio Armenteros, quien había visto en el equipo vasco una gran oportunidad de inversión.

Armenteros decidió invertir en el Eibar, y su primera medida fue construir el primer campo de entrenamiento de césped artificial de la comarca. También mejoró las instalaciones del campo de Ipura y reforzó la plantilla con la incorporación de jugadores de otros equipos de la zona.

Los resultados del equipo empezaron a mejorar rápidamente, y en la temporada 94-95 el Eibar consiguió el ascenso a la Segunda División B española. En los años siguientes, el equipo se consolidó en esta categoría y logró varias clasificaciones para los play-offs de ascenso a la Segunda División española, aunque nunca logró el ansiado ascenso.

El salto a la Segunda División española

Después de varios intentos fallidos, en la temporada 2012-2013 el Eibar consiguió finalmente el ascenso a la Segunda División española. La afición del equipo estaba entusiasmada con la noticia, pero el futuro de la entidad era incierto.

La Liga de Fútbol Profesional española obligaba a los equipos de esta categoría a tener un presupuesto mínimo de dos millones de euros, una cifra que el Eibar no podía cumplir. Sin embargo, la directiva del equipo no se rindió y consiguió recaudar suficiente dinero para cumplir con los requisitos de la LFP.

La temporada 2013-2014 fue una de las más emocionantes de la historia del Eibar. El equipo consiguió el ascenso a la Primera División española después de acabar segundo en la Segunda División, sólo por detrás del Deportivo de La Coruña. El ascenso supuso un hito para el club, que se convirtió en el primer equipo vasco en jugar en la Primera División después de diez años.

Un equipo modesto en la élite del fútbol español

La llegada del Eibar a la Primera División española no dejó indiferente a nadie. Un equipo modesto, que jugaba en un campo con capacidad para sólo 5.000 espectadores y que no cumplía con las normas de la Liga española, se había colado en la élite del fútbol español.

La temporada 2014-2015 fue una auténtica heroicidad para el equipo vasco. El Eibar logró la permanencia en la Primera División española después de una gran temporada, en la que logró derrotar a equipos como el Real Madrid o el Atlético de Madrid.

Pero la temporada 2015-2016 fue la más espectacular de todas. El Eibar volvía a pelear por la permanencia, pero esta vez con un equipo mucho más competitivo que el de la temporada anterior. Jugadores como Borja Bastón, Sergi Enrich o Dani García se habían unido al equipo y la afición estaba entusiasmada con las posibilidades del equipo.

El Eibar terminó la temporada en novena posición, una auténtica hazaña para un equipo que sólo llevaba dos años en la Primera División española. Además, Borja Bastón logró el trofeo al máximo goleador español de la Liga, con 18 goles.

El éxito del Eibar, una lección para el fútbol español

El éxito del Eibar en los últimos años ha sido una auténtica lección para el fútbol español. Un equipo modesto, con una afición entregada y una directiva ambiciosa, ha conseguido llegar a lo más alto del fútbol español. El trabajo bien hecho, la humildad y el sacrificio son los pilares del éxito del equipo.

Además, el Eibar ha demostrado que el fútbol no sólo se trata de millones de euros y grandes estadios. El equipo vasco ha demostrado que con una buena gestión, unido a la fidelidad de la afición, es posible luchar por los sueños.

En definitiva, el Eibar se ha convertido en un ejemplo de superación y esfuerzo para todo el mundo. Una pequeña ciudad con un equipo de fútbol en lo más alto de la Primera División española, demostrando que todo es posible si se trabajan duro y se cree en uno mismo. ¡Aupa Eibar!