En el juicio por el brutal asesinato de la joven Aintzane Pujana en Aizarnazabal, el jurado popular ha declarado culpables a los acusados, un hombre y una mujer, por cargos que incluyen asesinato, detención ilegal e inducción a la prostitución.

El jurado, compuesto por cinco mujeres y seis hombres, ha llegado a su veredicto por unanimidad tras analizar detenidamente todas las pruebas presentadas en el caso.

El fiscal había solicitado inicialmente la prisión permanente revisable para la mujer, autora confesa del crimen, pero finalmente retiró la petición debido a su trastorno límite de personalidad.

El veredicto señala que los acusados, de manera colaborativa, gestionaban los servicios de prostitución de Pujana en contra de su voluntad, y que la víctima fue acuchillada bajo las órdenes del acusado mientras estaba incapacitada por el consumo de alcohol.

Se ha determinado que no existen pruebas que demuestren que la acusada actuó bajo un miedo insuperable, pero que el consumo continuo de sustancias tóxicas empeoró su condición mental.

El fiscal ha mantenido sus peticiones de pena, mientras que la defensa de los acusados sigue argumentando su inocencia y buscando eximentes para la mujer.

Se ha solicitado mantener a la acusada en prisión provisional debido al riesgo de fuga y a su inestabilidad, así como al peligro de reincidencia del acusado.

El crimen ocurrió luego de una discusión entre los acusados y la víctima, quien recibió varias puñaladas en el cuerpo y fue encontrada sin vida dos días después.

El fiscal ha elogiado la labor del jurado y la solidez del veredicto, destacando la culpabilidad de ambos acusados en el caso.

Se ha determinado que el acusado principal manipulaba a la acusada, quien actuó como autora material del crimen bajo su influencia, siendo considerada igualmente responsable en el caso.