El capitán y delantero del Athletic de Bilbao, Iker Muniain, ha declarado que la final de la Copa del Rey en Sevilla contra el Mallorca fue un momento de angustia y terror extremo para el equipo. Sin embargo, asegura que la victoria ha sido como "vitamina pura, gasolina" para el equipo y espera que la salida de la gabarra sea espectacular.

En una visita a la Casa de Juntas de Gernika, Muniain compartió emociones vividas durante el partido en La Cartuja. Describió la experiencia como aterradora, pero finalmente feliz. Destacó la valentía de Mikel Vesga al superar un resbalón al tirar un penalti y el proceso de maduración de Julen Agirrezabala en la portería.

El jueves se espera una celebración masiva en Bilbao por la Copa ganada, y Muniain confía en que la afición dará un recibimiento espectacular. Además, se refirió a la importancia de mantener la motivación para la Champions y seguir peleando en la liga.

En cuanto a la llegada de la Copa a San Mamés, el día del cumpleaños de Óscar de Marcos, Muniain elogió la amistad y camaradería entre ambos. Agradeció el apoyo de Marcelino, el entrenador, y resaltó la importancia de los éxitos recientes del Athletic para transmitir un mensaje de perseverancia y superación a las futuras generaciones.