**SANTANDER/BILBAO, 2 de mayo.** En una muestra de unidad y determinación, los comités de empresa de las fábricas de Bridgestone ubicadas en Basauri, Bizkaia, y en Puente San Miguel, Cantabria, han convocado una manifestación para el lunes 5 de mayo. La cita será frente a la embajada de Japón en Madrid, en respuesta a la drástica decisión de la multinacional que propone un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a un total de 546 empleados, desglosándose en 335 trabajadores de la planta vizcaína y 211 de la cántabra.

Según han revelado a Europa Press representantes del comité, la concentración está programada para llevarse a cabo entre las 12 y las 14 horas, con la intención de visibilizar el descontento hacia las medidas anunciadas por la compañía japonesa.

Desde Cantabria, se organizarán tres autobuses que partirán a las 5:30 de la mañana del lunes, con un grupo inicial de 125 asistentes, que incluyen sindicalistas, trabajadores y familiares. Se prevé que el número total de participantes alcance o supere los 150. Además, desplazamientos similares se llevarán a cabo desde Basauri y Burgos, donde también se localiza otra de las instalaciones de Bridgestone.

El mismo día de la manifestación y el 6 de mayo, los trabajadores tendrán la oportunidad de participar en nuevas huelgas, coincidiendo con las reuniones críticas de negociación en torno al ERE. Este ciclo de encuentros es crucial, ya que se considera que el del lunes es uno de los últimos, dado que el martes 6 concluye el periodo legal de consultas, aunque existen indicios de que podría haber una extensión tras conversaciones entre las partes involucradas.

Fuentes cercanas al comité han señalado que, si bien ha habido comunicación entre ambas partes, el progreso ha sido limitado, ya que la compañía se ha concentrado mayormente en cuestiones técnicas, dejando diversos temas por discutir. Las expectativas de resolución son inciertas, y si el martes no se llegara a un acuerdo, se podría definir un calendario para continuar las negociaciones.

En caso de que no se logre un consenso previo a la fecha límite, la empresa tendrá un plazo de 15 días para notificar al comité su decisión final sobre el ERE y los posibles despidos, así como sobre el futuro de la situación laboral de sus empleados.