El 12 de mayo en Bilbao ha sido testigo de una nueva jornada de paro en la planta de Bridgestone en Basauri, donde los empleados han decidido unirse al nivel máximo a la huelga convocada para protestar contra el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) propuesto por la dirección. Según informes del comité sindical, hoy se celebrará una reunión crucial con la empresa en un esfuerzo por avanzar en las negociaciones.

Este encuentro se produce en el contexto de una revisión de la propuesta inicial de la empresa, que contemplaba un total de 546 despidos: 335 en Basauri y 211 en la planta de Puente San Miguel, en Cantabria. Sin embargo, en una reciente presentación, la dirección ha moderado su postura, reduciendo la cifra de despidos a 290 en la planta vizcaína y a 201 en la de Cantabria, lo que se traduce en mejoras para algunos trabajadores.

Entre las novedades, la empresa ha ofrecido aumentar las indemnizaciones a 45 días de salario por cada año trabajado, sin un límite, y ha manifestado su apertura a discutir posibles salidas voluntarias con incentivos. Esta propuesta ha generado expectativas entre los miembros del comité de empresa, quienes esperan que en la reunión de hoy se logren mejorar ciertos términos de la oferta presentada.

A pesar de estas negociaciones, los trabajadores han decidido reanudar la huelga, logrando un seguimiento total que ha resultado en la paralización de la producción en la planta de Basauri. Durante diferentes turnos, los empleados están llevando a cabo concentraciones en las entradas de la fábrica y se están organizando piquetes informativos. Además, han convocado una protesta en el puente cercano a la planta, con el objetivo de respaldar la mesa negotiadora en su lucha por mejores condiciones laborales.