En un contexto de incertidumbre laboral, el Gobierno Vasco, la Diputación Foral de Bizkaia y el Ayuntamiento de Basauri han mantenido una significativa reunión con los altos mandos de la empresa Bridgestone. El encuentro, celebrado el 10 de abril en Bilbao, tuvo como objetivo principal abordar la preocupante situación que enfrenta la planta de Basauri, la cual se ha visto afectada por la inminente decisión de despedir a 335 trabajadores.

Las autoridades vascas han exigido a Bridgestone un firme compromiso que asegure la continuidad de la planta en Basauri y han solicitado la apertura de un proceso de negociación. Este proceso busca mitigar el impacto social que podría resultar de esta drástica medida, en un intento de proteger no solo a los empleados, sino también al tejido social de la región.

En respuesta, la empresa se ha mostrado abierta al diálogo, señalando su intención de mantener una comunicación transparente pero reservada, dado lo delicado que es el proceso. Este planteamiento fue puesto de relieve por representantes del Gobierno Vasco, quienes resaltaron la importancia de analizar con seriedad todas las alternativas posibles en torno al futuro de la planta.

Durante la reunión, los funcionarios de las instituciones vascas, entre ellos la viceconsejera de Transición Energética, Irantzu Allende, y la diputada foral de Promoción Económica, Ainara Basurko, se reunieron con los altos directivos de Bridgestone. El propósito era obtener información directa sobre la situación y trabajar juntos en la búsqueda de soluciones para la plantilla afectada.

Este encuentro no solo representa el primer paso en una serie de negociaciones previstas, sino que también subraya la necesidad de un contacto constante y fluido entre Bridgestone y las instituciones, para evitar que la situación laboral en Basauri empeore. Se ha acordado continuar con las conversaciones a distintos niveles para asegurar la mejor resolución posible ante este reto.

Por parte de la empresa, asistieron el director de la planta de Basauri, Gaizka Prieto, y Constanza Pasqual, encargada de Relaciones Institucionales para el suroeste de Europa, quienes reafirmaron su disposición a colaborar en la búsqueda de una solución que beneficie a todas las partes implicadas.