Carlos Torres Vila, presidente de BBVA, ha resaltado la importancia de unir esfuerzos en el sector bancario en un momento decisivo para Europa. Para él, la creación de entidades financieras robustas y con mayor capacidad operativa es esencial para enfrentar los retos actuales del continente.

Durante la Junta General de Accionistas celebrada en Bilbao, Torres Vila expresó su firme confianza en la operación propuesta con Banco Sabadell, que incluye una OPA de carácter hostil seguida de una fusión. Aseguró que esta unión no solo beneficiaría a ambas instituciones, sino también a la sociedad en general, los clientes, empleados y accionistas de cada banco.

El presidente de BBVA hizo hincapié en que Europa se encuentra en un punto crítico, un momento que podría definir su futuro en el ámbito global. En su opinión, es imperativo que tanto Europa como España cuenten con bancos que posean la suficiente dimensión y fortaleza para impulsar inversiones en proyectos de relevancia estratégica.

Torres Vila manifestó que la fusión con Banco Sabadell es especialmente relevante en este contexto, ya que representa una apuesta por el crecimiento de España y sus empresas, contribuyendo de manera significativa al desarrollo del país y sus comunidades.

El mandatario del banco subrayó el carácter positivo de la operación, destacando que una vez que obtenga el visto bueno de las autoridades competentes, los accionistas de Banco Sabadell se incorporarán a un proyecto prometedor y atractivo, transformándose en parte de una entidad más capacitada para enfrentar el futuro.

En cuanto a los resultados financieros de BBVA, Torres Vila compartió su satisfacción por el desempeño del banco en 2024, año en el que se han superado por primera vez los 10.000 millones de euros en beneficios, con una rentabilidad del 20%. Esta sólida posición en el mercado europeo se traduce en una capacidad excepcional para equilibrar crecimiento y rentabilidad.

Además, el presidente señaló que los resultados positivos permitirán continuar creando valor y aumentar la remuneración para los accionistas, con un total de más de 5.000 millones de euros destinados a dividendos y recompra de acciones.